Con su permiso

Los presupuestos generales del Estado (PGE) están a punto de aprobarse. Pero no hay sopa Hispana sin pelo dentro, y éste es el PNV, que se niega a dar el apoyo al ejecutivo para sacarlos adelante mientras esté activo el 155. Y ahí es donde está el pelo. Pero el horizonte presupuestario comienza a despejarse. Pero como les he dicho anteriormente, falta la aprobación del pelo de la sopa Hispana, que no es otro que el PNV, que no dirá su última palabra, probablemente, hasta la última semana de abril, que es cuando el pleno del Congreso debe estudiar las enmiendas de devolución al Gobierno de los Presupuestos Generales del Estado de 2018. Los nacionalistas vascos mantienen un ojo mirando a lo que suceda en Cataluña, pero con el otro ya han cerrado diversos acuerdos con el ministro Montoro, que es como sabemos una línea de negocio como otra cualquiera. Algunos de esos acuerdos formaron parte de los PGE de 2017, pero todavía no están completados, ya que su ejecución está prevista en varios ejercicios, y afectan, sobre todo, a las infraestructuras. Pero también lo han cerrado Ciudadanos, Coalición Canaria y Nueva Canarias. En total, sumando algunos diputados del grupo mixto, 176 diputados. Es posible que el proyecto de ley, si sale adelante, finalice su tramitación parlamentaria la última semana de junio. A partir de ahí, el Gobierno estaría en condiciones de comenzar un nuevo ciclo presupuestario con la presentación del techo de gasto y de los objetivos de déficit para 2019. Estos son los acuerdos más relevantes ya cerrados. Equiparación salarial de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado con las policías autonómicas. Función Pública ha cerrado un acuerdo con los sindicatos que prevé una subida salarial del 1,75% en 2018; de un 2,25% en 2019, y de un 2% en 2020. Bajada del IRPF, se eleva el mínimo exento de 12.000 a 14.000€ y se aumenta la reducción por rendimientos del trabajo de los 14.000 a 17.000€. Se eleva el permiso de paternidad de cuatro a cinco semanas. Subida de las pensiones mínimas en una cuantía todavía no detallada, que en todo caso se financiará con impuestos y no con cotizaciones. En cuanto a las pensiones de viudedad, la cuantía de la base reguladora pasará del 52% actual hasta el 60%. Pero luego están las cifras macro económicas que afectan a unas economías que se escapan a nuestro día a día. Sólo falta que el PNV exprima más al gobierno en su favor y así por fin podamos tener todas estas ventajas. Eso espero o esperamos todos. Por eso, déjame que te cuente.