Cortejando

Inaudito. 7 Candidatos a presidir el partido corrupto del calle Génova. 7 Candidatos, válgame como va a terminar esto. Pero no hay sopa Hispana sin pelo dentro, y resulta que el candidato Casado, de nombre de pila Pablo, salpicado por el caso del máster, da la sorpresa al aportar más avales que nadie y contar con el apoyo expreso de más parlamentarios y de origen más diverso que sus mayores contrincantes, las dos mujeres peleadas hace ya tiempo y que ahora se disputan la presidencia del PP. El 80% de los 134 diputados del PP está al margen del previsto enfrentamiento entre partidarios de la ex vicepresidenta del Gobierno y los del aparato nacional aglutinados en torno a la secretaria general saliente, liderada por Cospedal. Es la proporción de los parlamentarios que habían dado por hecho que Alberto Núñez Feijoo se presentaría como candidato de unidad en el congreso extraordinario y siguen sin hacerse a la idea de ver partido en dos el Grupo Parlamentario para lo que quede de legislatura. La incomodidad de esa mayoría de diputados al tener que decantarse por Sáenz de Santamaría o por Cospedal quedó confirmada con el dato de que los pronunciamientos de los parlamentarios lleguen con cuentagotas y que sean casi todos previsibles, por proceder de sus antiguos equipos o sectores de ex ministros. Casado se ha movido entre los cuadros medios de Madrid, Asamblea y ayuntamiento, y cuenta con apoyos en las regiones clave que decidirán en el congreso extraordinario. María Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría le han ofrecido integrarse en su candidatura, pero ha rechazado ambas ofertas. Pero en contra del cortejado, está la fórmula de elección. Sólo pasan a la votación del congreso los dos precandidatos más votados, y en la fase posterior deciden los compromisarios, en principio más proclives a las recomendaciones de los aparatos regionales y provinciales. También juegan en su contra los trámites judiciales del caso del máster, máxime en un partido donde cualquier mácula, por pequeña que sea, sería mal vista y castigada por los electores. Casado asegura que seguirá hasta el final, hasta que se pongan las urnas el día 5 de julio en las sedes del PP de toda España. La guerra está servida. ¿Habrá sangre?, eso seguro. ¿El PP se desmoronará?, eso estará por ver, aunque viéndolas peleas internas, los follones ante la corrupción y el hacer la elección con votaciones, en contra de cómo se han elegido los candidatos anteriores, pues tiene toda la pinta de que sí, de que va a haber guerra, y si no la hay, pues nos divertiremos viendo como entre ellos se tiran mierda para conseguir el poder. La política en estado puro. Olé. Por eso, déjame que te cuente.