domingo, 10 de julio de 2011

No piensa las cosas

El amiguete Valeriano Gómez, el mismo que iba en cabeza de la manifestación del 29S y que ahora es Ministro de Trabajo (debería de llamarse del poco trabajo que hay, y el que tiene de eso lo tiene en un estado precario) también suelta perlas de esas que deberían colocarlas en mármol para que quedaran escritas toda la vida. Lo que dijo es una barbaridad como otra cualquiera. Pero esta tiene una diferencia, él debe de cumplir con el ejemplo. Les explico. Este ministro soltó lo siguiente: “HAY QUE SUBIR LOS IMPUESTOS A LOS BANQUEROS Y EMPRESARIOS, YA QU ELA DIFERENCIA ENTRE EL SUELDO DE ÉSTOS Y SUS EMPLEADOS NO SE PUEDE PERMITIR”. Hasta ahí estoy de acuerdo. Pero el ejemplo que debe de dar él, todos los políticos, todos los parlamentarios, senadores y sindicalistas (no se ría por dios, que en España todavía existe esa especie) chupópteros y parasitarios de esta España cutre y salchichera que nos ha tocado vivir es lo primero. Porque no se puede ser Senador y cobra 3.000€ al mes cuando la persona que trae el agua cobra 1.200€. No se puede cobrar una pasta gansa cuando los que tienes debajo escribiéndote los discursos y preparándote tus cosillas para cobren 1.400€. Para tú exigir, debes de aplicarte la receta y ser el primero en demostrar que eres capaz de hacerlo, y cuando eso lo hagas entonces pedir subida de impuesto o lo que tú quieras.
Esto de subir los impuestos a banqueros y empresarios es un tontería como otra cualquiera. Porque si a mi jefe le subes los impuestos, entonces pasara de tener una situación regular a mala, y entonces me iré yo y todos mis compañeros a la mierda, es decir, al paro para que la diferencia entre mi jefe, mi banquero, mi parlamentario y mi ministro sea ya no mayor, sino descomunal. Los banqueros a fin de cuentas son empresarios que ponen a la venta sus productos por el que reciben un dinero a cambio. A lo mejor lo que está mal no es que un banquero se forre vendiendo hipotecas o productos de su banco, porque por esa misma regla de tres al empresario que fabrica o embotella el agua también deberían de subirle los impuestos, porque se está forrando con su actividad. Lo que quiero decir, que lo que se tendría que cambiar son las leyes que regulan a los banqueros, que por cierto las hace personas como Valeriano Gómez sentado en un escaño del parlamento en donde la diferencia no es sólo en los sueldos, sino en el trabajo también. Tal vez el fallo esté ahí, porque a fin de cuentas, estos señores generan riqueza, ya que generan empleo y así unas pocas familias españolas tengan por lo menos para llegar a fin de mes y no apuntarse a las listas que el ministerio de Trabajo tiene para cuando no tienes nada que hacer. Debería de pensar las cosas antes de decirlas, porque si sigue así lo único que va a hacer es espantar las posibles inversiones de empresas en nuestro país, ya que no van a venir por la sencilla razón de que la van a crujir a impuestos. ¿Es eso lo que quiere Valeriano para España?. Porca miseria. Por eso, déjame que te cuente.

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